De Interrail por Europa
Este verano ha dado para muchas cosas, y entre ellas, visitar 6 países en 10 días en tren. ¿Cómo? Nos fuimos de Interrail por Europa. Un viaje lleno de aventuras inesperadas al que hay que estar abiertos a todas las posibilidades para disfrutarlo más. Nosotras optamos por reservar los alojamientos en algunas ciudades, dejando a la improvisación los billetes y algunas noches. Y todo ello intentando gastar lo mínimo posible.
Primera parada: Verona
Nuestra aventura comenzó en Verona. ¿Por qué allí? Sencillamente porque era el destino con los billetes de avión más baratos. Una ciudad pequeña pero preciosa, que se puede recorrer a pie. Imprescindible visitar la Casa de Julieta y La Piazza delle Erbe, con sus fuentes y edificios con encanto.
Venecia, una ciudad sin salida
Quién no ha oído hablar de Venecia y sus canales. Sus góndolas y rincones son dignos de visitar. Sin embargo es una ciudad que no te llevará más de un día. Es cara porque tiene poco espacio. Nosotras nos quedamos a dormir porque no nos quedó más remedio, pero no es lo más recomendable.
Como no teníamos los billetes reservados, pensábamos dirigirnos hacia Alemania. Resultó que no quedaba ni un billete, de modo que tuvimos que ir a Innsbruck, el único destino posible, con el inconveniente de tener que parar allí 5 horas en la madrugada, por lo que no nos convenía alquilar una habitación. Decidimos irnos antes de Venecia, pasar la tarde en Innsbruck y coger el primer tren hacia Alemania, teniendo que pasar un rato de la noche en la estación.
Una parada inesperada: Innsbruck
El recorrido en tren hacia Innsbruck, atravesando los Alpes, fue el más bonito de todo el viaje, como puedes ver en la imagen superior.
Allí conocimos a Linda, que nos guió por las calles de esta ciudad tan pintoresca de Austria. Fuimos a un restaurante con vistas panorámicas, visitamos el tejadillo dorado y cogimos el funicular Hungerburg a los Alpes.
#zahahadid #architecture #station #alps Una foto publicada por C a r m e n ? (@cmnestares) el
Munich en pocas horas
Debido a problemas de cuadrar reservas, solo pudimos pasar unas horas en Munich, nuestro siguiente destino, para llegar a Berlín por la noche. Visitamos la plaza del Ayuntamiento y dimos un paseo por la ciudad sin un itinerario concreto. Descansamos en un parque y tuvimos una cena típica alemana, dejando a un lado los bocadillos que nos habían acompañado durante todo el viaje.
Berlín y el ansiado descanso
Por fin llegamos a Berlín, el lugar donde íbamos a pasar dos noches, donde podríamos dejar las mochilas en un lugar seguro y donde podríamos dormir más de un día con tranquilidad.
El primer día dimos una vuelta por los lugares más típicos: Brandenburgo, Memorial del Holocausto o Checkpoint Charlie. Acabamos la noche en el barrio de estudiantes, con la ‘mala suerte’ de encontrarnos con el final de un rave, por lo que quedamos sorprendidas del ambiente de esa zona y nos volvimos al hostal.
Al día siguiente, contratamos un free tour, para que nos explicaran los lugares que ya habíamos visitado y algunos más. Después vimos la catedral y el muro de Berlín. Salimos por la zona de estudiantes ya en su estado normal.
Praga
Puedo decir que Praga, fue mi ciudad favorita de todo el Interrail por Europa. Aparte de lo bonita que es, las circunstancias acompañaron, aunque también tuvimos nuestras adversidades, como la pérdida momentánea de la GoPro.
Imprescindible visitar: la plaza del Ayuntamiento, con el reloj astronómico, el puente de San Carlos y subir a algún mirador para ver la ciudad desde arriba.
Antes de volver a Budapest, debíamos hacer tiempo para coger el tren a las 5 de la mañana, por lo que aprovechamos para salir y conocer la que dicen que es la discoteca más grande de Europa: Karlovy Lazne.
Entérate de las 10 mejores cosas que hacer en Praga leyendo este post.
Último destino: Budapest
Nuestra viaje termina en Budapest, ciudad dividida por el rio Danubio. Nosotras elegimos visitar la Iglesia de San Esteban, pasear a orillas del río, ver el castillo de Buda y contemplar las vistas del Parlamento desde el Bastión de los pescadores.
Budapest #travel #wanderlust #interrail #photography Una foto publicada por C a r m e n ? (@cmnestares) el
Lo más ‘in’ en Budapest es visitar los bares en ruinas, que resultaban ser unos espacios bastante monos. El que puedes ver en las fotos es el Fogas Ház.
Cerrando este mega post, el Interrail por Europa ha sido una aventura increíble y divertida, en la que aparte de visitar nuevos lugares del mundo, te sirve para apreciar las cosas sencillas. Muy recomendable!
Si te he convencido a hacer este viaje, te dejo un post con los pasos para organizar la ruta interrail.
magnificas las fotos de un viaje envidiable
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